Acaricie sus plantas de casa

Romanos 5:8
“Pero Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros”.

Los científicos han sabido desde 1970 que las plantas tienen sentimientos.  Investigaciones adicionales están demostrando no sólo más maneras en las que las plantas reaccionan a sus medio- ambientes, sino también como las plantas responden a los cambios.

Acaricie a sus plantas de casaLas plantas reaccionan ante el viento, la lluvia e inclusive al toque humano.  Pero como no puede cambiar de lugar en respuesta a su ambiente como los animales o los seres humanos, ellas reaccionan de otras formas.  Estas reacciones parecen ser controladas por un gen dentro de la planta que es activado por el viento, la lluvia o la mano humana.

¿Cómo son los árboles en una costa azotada por vientos y tormentas? ¿Son rectos y altos?  No, a menudo son pequeños y robustos, tal vez incluso doblados para soportar las tormentas.  En un área protegida, ese mismo árbol pudo haber crecido recto y alto.  Pero el constante estrés del viento y la lluvia causan que el árbol responda de esta manera.  Los científicos han encontrado que el toque humano sobre las hojas de las plantas puede tener el mismo efecto que el viento y las lluvias.  Durante un período de tres semanas, las plantas que fueron tocadas dos veces al día eran más pequeñas y robustas y hasta la mitad de alto que las plantas que no fueron tocadas.  Una lección es que si tiene plantas que se están haciendo altas y flacas, usted debería tomarse el tiempo de acariciar las hojas.

No debemos sorprendernos al saber que las plantas responden a sus alrededores – e inclusive a caricias cariñosas.  Después de todo, son la creación de Dios que creó a los seres humanos porque quería alguien a quien amar.

Prayer:
Amado Padre celestial, el mensaje a través de Tu Palabra es que Tú deseas amarnos, a pesar de que pecamos y arruinamos Tu creación. Te agradezco que Tu enviaste a Tu Hijo Cristo Jesús quien me salvó de mis pecados, la muerte y el diablo. En Su Nombre. Amén.

Notes:
Decker, C. 1990. “Plants under pressure: the touch that stunts.” Science News, Feb. 24. p. 117.