Antenas de mosquitos replegables
Salmos 40:5a
“Muchas son, SEÑOR mi Dios, las maravillas que tú has hecho”. (NVI)
La mayoría de personas saben que es el mosquito hembra el que se alimenta de sangre. El macho se alimenta de jugos de plantas. También es fácil ver la diferencia entre machos y hembras en la mayoría de especies. El macho tiene un distintivo par de antenas. Mientras que las antenas del mosquito hembra son difíciles de ver, las del macho parecen como un par de plumas ramificadas que salen de su cabeza. Y si no fuese por una característica muy especial, estas grandes, antenas emplumadas le harían difícil de volar.
Cada antena está plantada en una cavidad, junto a la cual hay una almohadilla, hecha de proteínas especiales. Esta almohadilla en realidad es un motor impulsado por agua. Cuando vuela las antenas del mosquito están aplanados contra su cabeza. Pero cuando aterriza, él levanta sus antenas para poder escuchar. Para levantar las antenas, una poca cantidad de agua de su sistema es bombeada a la almohadilla que incrementa su tamaño en un 25 por ciento y causa que la almohadilla se despliegue, levantando las antenas.
La naturaleza está llena de tantas maravillas que nos sería fácil perdernos en ellas. Pero cada una de estas maravillas está diseñada por Dios para guiarnos a desear aprender más acerca de Él – especialmente para aprender en Su Palabra que Él quiere una relación con usted a través de Su Hijo, Cristo Jesús.
Prayer:
Amado Padre celestial, lléname de asombro y agradecimiento por todas tus maravillosas obras, y especialmente por Tu perdón hacia mí a través de Cristo Jesús. En Su Nombre. Amén.
Notes:
Life’s devices: the physical world of animals and plants by Steven Vogel, (Princeton University Press, 1988), p.255