El control de pestes natural de las plantas

Isaías 40:29
“Él da esfuerzo al cansado y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas”.

La mayoría de nosotros sabemos que una planta bajo estrés es más probable de tener problemas con insectos.  Si una planta esta seca por ejemplo, le ponemos agua, esperando que recupere la salud y esté fuerte para enfrentar los ataques de los insectos.

Pero en el campo, nadie se presenta con un envase de poner agua cuando se pone seco.  ¡Irónicamente, la mayoría de nosotros estamos intentando lograr que nuestras propias plantas crezcan tan bien como lo hacen en el campo!  Ahora la ciencia puede haber descubierto una provisión que el Creador ha incorporado en las plantas para protegerlas del estrés de poca agua.

El estrés severo de falta de agua es malo para las plantas, pero el estrés de poca agua en realidad ayuda a las plantas a defenderse de los insectos.  Por ejemplo, las hojas de una planta se hacen más difíciles de masticar y contienen menos nutrición cuando tienen demasiada agua.  Por otro lado, cuando las hojas tienen poca agua empiezan a producir insecticidas suaves.  Algunas plantas también empiezan a producir ceras y otras substancias para protegerse a sí mismas bajo condiciones de estrés.  Una vez que se remueve el estrés del agua, las plantas pueden regresar a una operación normal de la noche a la mañana.  

El Creador ha provisto sabiamente tanto para las plantas y los insectos por medio de este balance.  Cuando las plantas tienen suficiente agua y puede ofrecer alimento para insectos, los insectos pueden comer, sin estorbos.  Pero cuando una planta apenas tiene lo suficiente para sí mismo, se le da la habilidad de defenderse de los insectos.

Prayer:
Señor, a veces en nuestro mundo pecaminoso, tenemos la tentación de aceptar la idea de que la vida realmente es la supervivencia de los más fuertes. Como resultado, nuestro amor se hace frío y nuestra tolerancia de lo que debemos tolerar es corta. Perdona y fortalécenos, en Cristo Jesús. Amén.

Notes:
J. Raloff, “A little thirst can aid plant defenses,” Science News, July 15, 1989, p.37.