El pie todo propósito

Salmos 44:8
“¡En Dios nos gloriaremos todo el tiempo y por siempre alabaremos tu nombre!”

Nada es más frustrante que goma que no quiere pegar.  Y nada es más difícil en la habilidad de un adhesivo de pegar que el agua.  El agua puede prevenir que los adhesivos toquen sólidamente las superficies que deben adherirse.  Las temperaturas de congelación y de descongelación pueden forzar a que superficies pegadas se separen.  Sin embargo, los adhesivos biológicos constantemente trabajan sin fallar en continuo contacto con el agua.

El mejillón es el campeón en el uso de adhesivos biológicos en la creación.  Cuando un mejillón encuentra un lugar apropiado, extiende su pie todo-propósito.  Su pie que es como una ventosa de goma, busca en la superficie hasta que encuentra el lugar exacto donde se podría adherir mejor.  El pie entonces limpia el punto de adhesión.  Luego, el pie se presiona a la superficie y mientras el pie en forma de ventosa se aplana y empieza a bombear agua.  El mejillón entonces levanta el centro de su “ventosa” creando un pequeño vacío.  Ahora los ingredientes para su adhesivo son bombeados por pie y hacia el vacío.  Este material crea una base espumosa para los hilos de goma individuales.

La goma misma está hecha de varias proteínas.  Están mezcladas en varias proporciones para proveer la correcta cantidad de fuerza, flexibilidad y resistencia para la compresión necesaria para cada lugar exclusivo de anclaje.  Algunas de estas proteínas son muy inusuales en estructura.  Los científicos sospechan que cambian sus propiedades en respuesta al cambio de condiciones – lo que los científicos llaman un material “inteligente”.

El mejillón no sólo es una maravilla de diseño, sino un químico sofisticado también.  La ciencia moderna todavía está intentando aprender lo que el Creador ha enseñado al mejillón acerca del pegamento.

Oración: Amado Señor, cuando la ciencia intenta aprender como un mejillón hace pegamento, está reconociendo que la creación tiene diseños sofisticados.  Aún si es sin intención, esto es adoración para Ti.  Yo también Te alabo.  Amén.

REF: Amato, Ivan. 1991. Stuck on mussels. Science News, v. 139, Jan. 5. p. 8. Foto: Mussels, Envato.