¿Es una planta o un animal?

Salmos 93:5
“Tus testimonios son muy firmes; la santidad conviene a tu Casa, Jehová, por los siglos y para siempre”.

Al aprender más acerca de la creación de Dios, encontramos que un número de cosas que hemos aprendido en la escuela realmente no son verdad, y nunca lo fueron.  Aprendimos en la escuela que las plantas son plantas y los animales son animales, y que siempre hay claras diferencias entre ellos.  También aprendimos que las cosas complejas como los ojos se encuentran en criaturas más elevadas y evolucionadas.

Los dinoflagelados están consideradas por los biólogos a estar entre las formas más simples de vida celular.  Sin embargo, estas sorprendentes criaturas están lejos de ser simples.  Tanto los zoólogos, que estudian los animales, y los botánicos, que estudian las plantas, afirman que las dinoflagelados pertenecen a su área de estudio.  En otras palabras, ni los científicos pueden resolver si son plantas o animales.  Muchos dinoflagelados – aunque no son más que una sola célula – tienen un órgano de sentido como un ojo.

Algunos dinoflagelados causan la mortal marea roja que a menudo mata peces.  Otras arrojan un tinte rojo durante el día que es inofensivo y por la noche producen brillantes despliegues de fosforescencia.  Muchos tienen un apéndice en forma de látigo para nadar.

Aunque son pequeños, incluso estos llamados formas simples de vida unicelular no son para nada simples.  La palabra del hombre, incluso en asuntos de ciencia, nunca puede estar tan segura como la Palabra de Dios acerca del hecho que Él hizo todas las cosas.  Como dice la Palabra de Dios, toda criatura fue creada en su forma terminada.

Oracion:
Amado Padre en el cielo, te agradezco que Tu Palabra puede ser confiada. Ayúdame a ver más claramente como la palabra del hombre, sin importar cuan sincera, nunca puede ser más segura y cierta que Tu Palabra. En Nombre de Jesús. Amén.

Ref: The Facts on File Dictionary of Botany, (Market House Books Limited, 1984), p. 106; and Signet Science Library Book, (Houghton Mifflin Company, 1963), p. 216. Photo: Ceratium furca dinoflagellate. Courtesy of Minami Himemiya. Licensed under the Creative Commons Attribution-Share Alike 3.0 Unported license.

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