Falsa araña

1 Pedro 5:6-7
“Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte a su debido tiempo. Echad toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”

Una de las virtudes de la araña es que ama comer moscas.  Sin embargo, no todas las arañas atrapan moscas en sus telarañas.

La araña saltadora acecha a su presa hasta que, como un pequeño tigre, está lo suficientemente cerca para atacar.  En vez de definir su territorio con una telaraña, la araña saltadora podríamos decir que lleva su territorio consigo.  Dondequiera que se encuentre la araña saltadora se convierte en su territorio.  Cuando una araña saltadora se encuentra con otra, ellas agitan sus patas la una a la otra, advirtiéndose que retrocedan.  Allí radica la historia de cómo una especie de mosca de la fruta es capaz de superar a la araña.  A diferencia de la mayoría de moscas de la fruta, esta especie en particular tiene rayas en sus alas.  Cuando agita sus alas sobre su cabeza, tiene la apariencia como de una araña saltadora declarando su territorio.  Cuando es asechada por una araña saltadora, la mosca puede convencer a la araña de que es otra araña saltadora protegiendo su territorio.

Los investigadores han descubierto el por qué este truco funciona aunque la mosca no se parece en nada a una araña.  La respuesta de la araña al patrón está pre-cableado en su cerebro y es activado por ciertas células en sus ojos.  Estas células sólo se activan por medio del despliegue del patrón.  La araña automáticamente reacciona al patrón.  ¡Lo único que tiene que hacer la mosca es fingir el patrón y está a salvo!

La estrategia de la mosca de la fruta requiere un conocimiento sofisticado del sistema nervioso de la araña saltadora así como de su comportamiento.  Es seguro decir que ninguna mosca de fruta pudo haber creado esta estrategia.  Sólo pudo haber sido originado por el Dios que los creó a los dos.

Prayer:
Amado Señor, Tú cuidas de todas Tus criaturas y lo haces de formas que crean admiración en nosotros. Oro que Tu cuidado por mí siempre sea tal que cree admiración y alabanza de mi parte así como de otros. Amén.

Notes:
On display: the stars of the stripes. Discover, May 1987. p. 9.