Hechos sorprendentes acerca del ojo

Salmos 139:14
“Te alabaré, porque formidables y maravillosas son tus obras; estoy maravillado y mi alma lo sabe muy bien”.

Nuestros ojos hacen más trabajo y dicen más acerca de nosotros de lo que mucha gente se da cuenta.  Estos sorprendentes órganos están tan cercanamente ligados al cerebro que se han sido mencionados como parte del cerebro.

Sus ojos estuvieron entre sus primeros órganos en formarse.  Dentro de las cuatro semanas de fertilización los ojos de un infante aún no nacido empiezan a formarse.  Curiosamente, muchos recién nacidos pueden mover sus ojos independientemente el uno del otro, lo cual puede ser una sorpresa para los padres desprevenidos.  Por lo general los ojos están funcionando juntos dentro de unos pocos meses.  Sin embargo, aquellos músculos oculares tendrán más ejercicio durante nuestras vidas que cualquier otro músculo voluntario.  Durante cualquier periodo de 24 horas nuestros ojos se moverán alrededor de 100.000 veces.  ¡Esto es equivalente a caminar por 50 millas todos los días!

Algunos estudios han demostrado que las personas con ojos oscuros generalmente tienen un tiempo de reacción más rápida que las personas de ojos claros.  Las personas de ojos cafés por lo general son mejores en tenis mientras que a las personas de ojos azules por lo general les va mejor en el golf.  Nuestros ojos segregan diferentes tipos de lágrimas.  Las lágrimas normales contienen químicos que combaten bacterias producidas por células en el revestimiento del párpado.  Lágrimas emocionales contienen hormonas liberadas por el cuerpo en respuesta al estrés, incluyendo un analgésico natural.  Un hecho más acerca del ojo.  La vitamina A en las zanahorias es necesaria para el funcionamiento apropiado de los bastones en sus ojos.  Los bastones en sí son los responsables para la visión nocturna.  ¡En una clara noche oscura un ojo saludable puede ver la luz de una sola vela a 25 millas (40 kilómetros) de distancia!

Como la Biblia exclama en adoración a Dios, “Te alabaré, porque formidables y maravillosas son tus obras”.

Prayer:
Amado Señor, Te agradezco que no escatimaste nada al crearme. Y cuando el pecado me había tomado, Te agradezco que no escatimaras nada, incluyendo Tu propia vida, por mi salvación. Permite que mi vida sea de agradecimiento y alabanza a Ti. Amén.

Notes:
McCutcheon, M. 1989. The Compass in Your Nose . . . . Los Angeles: Jeremy P. Tarcher. p. 101.