Hormigas que hacen jardinería

Génesis 2:15
“Tomó, pues, Jehová Dios al hombre y lo puso en el huerto de Edén, para que lo labrara y lo cuidara”.

Los evolucionistas dicen que la agricultura y la jardinería son actividades muy avanzadas.  Dicen que los humanos primitivos no hacían estas cosas, y que la jardinería se desarrolló tan solo recientemente en la historia humana.  Pero si hay un Creador, esperaríamos que Él  haya enseñado a muchos tipos de criaturas a cuidar de las plantas e inclusive de  los árboles.

¿Adivine qué?  Inclusive hay hormigas que hacen jardinería.  Hay un tipo en particular de hormigas feroces que cuidan de la acacia cuerno de toro sudamericano.  Aunque las hormigas no necesitan del árbol para su supervivencia, sí comen partes de este.  Pero nunca comen lo suficiente para causarle daño al árbol.  De hecho, las hormigas protegen su árbol – ellas recortan enredaderas o cualquier cosa que crezca demasiado cerca del árbol, manteniendo suficiente lugar de crecimiento para su árbol.  Las hormigas son lo suficientemente agresivas para mantener lejos a otros insectos e inclusive pájaros o animales más grandes de su árbol.

Al estudiar esta asombrosa relación, los investigadores han removido las hormigas de algunos de estos árboles.  Dentro de dos a quince meses el árbol muere.  Sin el cuidado de las hormigas, los animales se comen todas las hojas y las plantas a su alrededor lo invaden.

¿Quién enseñó a estas hormigas la jardinería?  ¿Cómo podían dos tipos tan distintos de vida desarrollar una relación tan cercana?  Esto resulta como un gran misterio para la evolución.  Sin hormigas usted no podía evolucionar este árbol, y sin el árbol las hormigas no podían aprender a cuidarlo.  No hay vueltas que dar.  Ambos fueron creados totalmente formados, y el Creador enseñó a las hormigas como cuidar del árbol.

Prayer:
Padre, Veo por mí mismo que Tu Palabra es verdadera al mirar el mundo que me rodea y que Tú lo creaste. Te pido que me muestres lo que quieres que yo haga como Tu creación y que de testimonio de la verdad del perdón de pecados, que es nuestro a través de Tu Hijo, Cristo Jesús. Amén.

Notes: