La amistad no es nada amistosa hacia la evolución
Juan 15:13
“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos”.
Se ha argumentado durante mucho tiempo que los animales no se hacen amigos. De acuerdo al pensamiento evolucionista, los animales sólo se hacen amigos entre parientes porque beneficia a otra criatura que comparte su misma reserva de genes. ¡Se dice que la sobrevivencia de su reserva de genes es la fuerza motivadora para cada criatura viviente aunque el conocimiento animal sobre la reserva genética sigue siendo un misterio!
Un estudio detallado de selectas poblaciones animales cuestiona esta manera de pensar. El zoológico de Atlanta tenía dos jirafas hembras y un macho. Luego de 9 años juntos sin aparearse, el macho fue enviado a otro zoológico. Esto produjo un comportamiento agitado entre las hembras y levantó la pregunta: ¿habían desarrollado estos animales una amistad? Se hizo un estudio en el zoológico de San Diego donde había 12 jirafas. Entre otras cosas, se encontró que las madres jirafas con críos a menudo se juntaban entre sí. Ciertos animales pasarían 15 por ciento de su tiempo con la misma jirafa. Además se señaló que, entre otra población de jirafas, ciertas hembras fueron vistas con la misma hembra entre un tercio y mitad del tiempo. Señales similares de amistad se han señalado entre rinocerontes, delfines e inclusive murciélagos vampiros.
Parecería que los amigos son un regalo que Dios no sólo ha dado al hombre, sino a muchas de Sus criaturas, y no tiene nada que ver con la evolución o la reserva genética.
Prayer:
Señor, Te agradezco por los buenos amigos que tengo, pero sobre todo Te agradezco por Tu amor por mí. Amén.
Notes:
Science News, 11/1: 2003, pp. 282-284, Susan Milius, “Beast Buddies.