La arquitectura de Dios vuelve a ganar

Salmos 127:1
“Si Jehová no edifica la casa, en vano trabajan los que la edifican; si Jehová no guarda la ciudad, en vano vela la guardia”.

Si usted vive en un clima temperado, probablemente han escuchado su hogar hacer ruidos en los días fríos.  Esos ruidos son causados por diferentes materiales en su casa que se contraen en diferentes índices mientras la temperatura cae.  En algún momento las crecientes tensiones son liberadas y usted escucha el resultado.  Si usted vive en un clima cálido que es sujeto a huracanes, usted sabe que el edificio tiene la probabilidad de fallar en el punto donde las diferentes partes de la casa, como el techo y las paredes, se unen.

Los edificios están hechos de una gran cantidad de cosas, cada una de las cuales actúa de diferente manera bajo las mismas condiciones.  Esto crea puntos débiles en cualquier estructura.  Arquitectos británicos han mirado la estructura de las cosas vivientes para encontrar una respuesta a este problema.  Ellos señalaron que los esqueletos pueden funcionar bien bajo condiciones que causarían que cualquier otro material de construcción fallaran.  Un investigador señaló que un esqueleto es más eficiente que cualquier estructura hecha por hombres.  La sugerencia de un arquitecto era construir edificios como paredes y puentes de hueso artificial que sea formado para las necesidades de la estructura.

No deberíamos sorprendernos de que, una vez más, el hombre está mirando hacia el mundo viviente para encontrar soluciones a sus problemas.  El mundo viviente, como todo lo demás, fue diseñado por nuestro todo sabio Dios que hace todo bien.

Prayer:
Padre, Te agradezco que soy hecho maravillosamente. Ahora ayúdame a construir mi vida en Tu Palabra. Amén.

Notes:
New Scientist, 9/16: 2000, p. 7. Illustration: Cross-section of bone. (PD)