¡La luz se dobla!

Génesis 1:16
“E hizo Dios las dos grandes lumbreras; la lumbrera mayor para que señorease en el día, y la lumbrera menor para que señorease en la noche; hizo también las estrellas”.

Foto: Una de las fotografías de Eddington del eclipse total del sol de 29 de mayo de 1919, presentado en su papel de 1920. Quizás pueda recordar que fue Arthur Eddington quien midió la curvatura de la luz estelar cerca del sol durante un eclipse en 1919. Su trabajo validó los detalles de la Teoría General de la Relatividad de Einstein y  estableció a Eddington como uno de los astrónomos más importantes de todos los tiempos.

Pero, pueda que usted no haya escuchado alguna vez que este gran científico fue también un hombre de gran fe. Toda su vida fue influenciada por su reverencia a Dios como Creador. De hecho, escribió que los detalles de la creación eran dignos de ser medidos, estudiados y apreciados. En su libro- “La Ciencia y el mundo invisible”-, Eddington declaró que el significado del mundo no era detectable en la ciencia, sino que debe buscarse a través del entendimiento de realidades espirituales. ¿Cuántos científicos hoy en día saldrían a decir algo así?

Como el autor y creacionista Don DeYoung, señala en su libro –“Exploradores Pioneros del Diseño Inteligente”-, Eddington evitó ofrecer pruebas de la existencia de Dios, pero dijo que ni la más perfecta prueba de la existencia de Dios sustituiría una relación personal con Él. Esa relación podría tomar incluso los argumentos más convincentes contra la existencia de Dios y ponerlos inofensivamente de lado.

Eddington, estuvo absolutamente correcto. Una relación vital con nuestro Creador, Jesucristo, nos salvaguarda incluso de las afirmaciones más convincentes de los ateos. No sólo tendremos la certeza de que Dios existe, sabremos por experiencia personal, la paz que viene de tener una relación íntima con nuestro Creador y Salvador.

Prayer:
Padre Celestial, pido por los evolucionistas para que cuando ellos lleguen a Ti por fe, su vida tenga un impacto en muchos otros. Amén.

Notes:
Don DeYoung, Exploradores Pioneros del Diseño Inteligente, págs. 2-3 (BMH Libros, 2006). Foto: Una de las fotografías de Eddington del eclipse total del sol de 29 de mayo de 1919, presentado en su papel de 1920 que confirma la teoría de Einstein de que la luz se “dobla”. (PD