La oración de Maxwell

Salmo 90:12
“Enséñanos de tal modo a contar nuestros días, que traigamos al corazón sabiduría”.

Image: James Clerk Maxwell Monumento en Edimburgo. Cortesía de Kim Traynor.El gran científico James Clerk Maxwell, un contemporáneo de Charles Darwin, ciertamente no era amigo de la teoría de la evolución de Darwin. Aun así, los evolucionistas más acérrimos de hoy estarían de acuerdo con que Maxwell fue un científico de proporciones gigantescas, situándose a la altura de los científicos famosos como Sir Isaac Newton.

En un programa previamente transmitido de Momentos de la Creación, les dijimos que Maxwell creía que Jesucristo es el Salvador que vino a librar a la humanidad de los resultados del pecado. También, mencionamos que uno de sus escritos, encontrado después de su muerte, decía que la motivación de su trabajo era que Dios había creado todas las cosas como lo dice el Génesis. Y puesto a que Dios creó a los seres humanos a su imagen, el estudio científico es una actividad adecuada para el trabajo de toda la vida de alguien.

Pero el corazón de Maxwell por Dios se manifiesta más claramente en una oración que escribió y, que se encontró en sus notas después de su muerte en 1879 a la pronta edad de 48 años. El resto de la emisión de hoy se encuentra en las propias palabras de Maxwell:

“Dios Todopoderoso, que has creado al hombre a tu imagen y semejanza, y le has hecho un alma viviente que te busque, y que tienes dominio sobre tus criaturas, enséñanos a estudiar las obras de tus manos, de modo que podamos dominar la tierra para nuestro uso, y fortalezcamos la razón de tu servicio; para poder recibir tu bendita Palabra, de modo que podamos creer en Aquel a quien tú has enviado, para darnos el conocimiento de la salvación y el perdón de nuestros pecados. Todo lo cual pedimos en el nombre del mismo Jesucristo, nuestro Señor”.

Prayer:
Padre Celestial, Te ruego que des a más científicos la fe que guió a hombres como James Clerk Maxwell. Ayúdales a ver la ciencia como el estudio de las obras de Tus manos. En el nombre de Jesús. Amén.

Notes:
Citado en E. L. Williams y G. conducían, Ciencia Física para escuelas cristianas, Bob Jones University Press, Greenville, Carolina del Sur, 1974, pág. 487. Foto: James Clerk Maxwell Monumento en Edimburgo. Cortesía de Kim Traynor. Bajo la licencia de Creative Commons Attribution-Share Alike License 3.0 licencia no portada