La Visión de Dios de La Educación
Deuteronomio 6:7
“Y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.”
Los padres cristianos están preocupados con razón por algunas de las cosas que se enseñan a sus hijos en las escuelas públicas. Les preocupa que a sus hijos se les enseñe una moral diferente que no es una moral bíblica. Les preocupa que a sus hijos no se les enseñe la verdad sobre “La Teoría de La Evolución” o sobre “La Creación”. Y, nuestras respuestas con frecuencia se enfocan en persuadir a los distritos escolares para que enseñen todos los puntos de vista sobre los orígenes, incluida la Biblia, y por el derecho a retirar a nuestros hijos de lecciones sobre moralidades y estilos de vida alternativos. A veces, necesitamos detenernos y pensar: ¿Estamos sólo poniendo un pequeño parche para cubrir una enorme fractura?
Creemos que las escuelas capacitan a nuestros jóvenes para vivir en el mundo. Pero, cuando ingresan al mundo del trabajo, ¿cuántos jefes encuentran ellos que segregan a sus trabajadores en grupos de edad? La Biblia habla de manera diferente de la educación. “Enseñarás [estos mandamientos] diligentemente a tus hijos, y hablarás de ellos cuando te sientes en tu casa, cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes” (Deuteronomio 6: 7).
Somos los padres quienes somos responsables de la educación de nuestros hijos, y un día seremos juzgados por lo bien que hicimos esto, o si entregamos la responsabilidad a aquellos que no enseñarían a nuestros hijos el camino correcto a seguir. Asegurémonos de que a nuestros hijos se les enseñe la verdad desde el principio y durante toda su infancia.
Oración: Señor, traemos a nuestros hijos ante Ti y oramos para que nos ayudes a instruirlos en el camino que deben seguir. Amén.
Ref: Wayne, I. (2017), Educación: ¿Tiene Dios una opinión? (Green Forest, AR: Master Books). Imagen: Adobe Stock Imágenes, con licencia del Autor.
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