Juan 11:11-12
“Dicho esto, agregó: —Nuestro amigo Lázaro duerme, pero voy a despertarlo. Dijeron entonces sus discípulos: —Señor, si duerme, sanará”.

Cuando usted está enfermo, necesita dormir.  Y cuando está enfermo por lo general está somnoliento.  Los investigadores médicos ahora están aprendiendo que no es accidental que la enfermedad y la somnolencia vayan juntas.  De hecho, la relación es uno de los diseños ingeniosos de Dios.

A principios de este siglo los científicos aislaron lo que llamaron el factor S – la S de “sleep” dormir en inglés.  Los bioquímicos han identificado el factor S como un bioquímico que se libera de las paredes celulares de las bacterias cuando nuestros cuerpos las destruyen.  Este químico encuentra su camino al cerebro donde induce dormir.  También estimula el sistema inmunológico.  Por lo general el cuerpo descompone algunas de las bacterias inofensivas que viven en el sistema digestivo todos los días.  Para el fin del día suficiente factor S se ha recolectado en nuestra sangre para hacer que la hora de dormir sea bienvenida.

Sin embargo, cuando estamos luchando contra una infección bacterial, nuestro cuerpo está destruyendo muchas bacterias adicionales y así liberando más factor S.  Ese factor S también está estimulando nuestro sistema inmunológico a mayores niveles de actividad.  Los investigadores recomiendan que cedamos ante nuestro deseo de dormir cuando estemos enfermos.  Nuestro sistema inmunológico y el dormir sin soñar están cercanamente relacionados.  En otras palabras, la abuela tuvo razón cuando nos dijo que evitaríamos enfermarnos si dormíamos lo suficiente.

No es un accidente el que las infecciones bacteriales activen al cuerpo a reaccionar no sólo para deshacerse de la bacteria sino también para fortalecerse para la lucha.  Este diseño ingenioso es aún otro indicador de que a nuestro Creador sí le importa lo que nos sucede.  Ese amor es la razón por la cual envió a Su Hijo para lograr nuestra salvación en la cruz del Calvario.

Oración: Amado Padre, Te agradezco por una buena salud y las habilidades que le has dado a mi cuerpo para que pueda mantenerse saludable. Oro por que Tú también me puedas ayudar a mantenerme espiritualmente saludable. En Nombre de Cristo Jesús. Amén.

Notas: Feeling sleepy? Shhh! Bacteria at work. Discover, p. 12. Foto: Sleeping woman, Envato.

Share this:
Attachments
  • portrait-of-woman-asleep-on-sofa