Romanos 11:33
“¡Profundidad de las riquezas, de la sabiduría y del conocimiento de Dios!¡Cuán insondables son sus juicios e inescrutables sus caminos!”

Los murciélagos están entre las criaturas menos apreciadas de todo el mundo.  Sin embargo estos merecen nuestro aprecio.  Casi todos los murciélagos comen solo insectos o fruta.  Solo una especie tropical se alimenta de sangre-usualmente la sangre del ganado.

Existen miles de especies de murciélagos.  Increíblemente los murciélagos constituyen un cuarto de todas las especies de mamíferos en la tierra.  La mitad de todas las especies de mamíferos encontrados en el trópico son murciélagos.

El murciélago más pequeño del mundo es el murciélago de nariz de cerdo de Kitti, que no es más grande que un abejorro y pesa menos que un centavo.  Los murciélagos más grandes son los murciélagos de fruta.  Estos murciélagos completamente inofensivos tienen una envergadura de varios pies.  La mayoría de murciélagos viven en colonias, y algunas colonias tienen hasta 20 millones de miembros.

Los murciélagos son beneficiosos tanto para los humanos como para la naturaleza.  Muchos de los murciélagos encontrados en Norte América, así como en otras partes del mundo, son los responsables de consumir miles de toneladas de insectos cada noche.  Otros murciélagos polinizan las flores.  Los murciélagos también son una conexión esencial en la ecología que hace posible el bosque tropical húmedo.

Los murciélagos más antiguos encontrados en los registros de fósiles son como los murciélagos de hoy.  Están completamente formados con alas para volar completamente desarrolladas.  Esto significa que no existe ni una sola pizca de evidencia fósil que apoye la afirmación de que los murciélagos evolucionaron de alguna otra criatura.  Podemos concluir que la evidencia científica dice que los murciélagos fueron creados por Dios tal cual como en su forma actual.

Prayer:
Padre, tu sabiduría es tu propio testigo. Ayúdame a apreciar tu sabiduría y a buscarla más en tu Palabra. Cuando no puedo entender lo que tu estas haciendo en mi vida, fortalece mi fe y asegúrame de tu amor. En nombre de Jesús. Amén.

Notes:
Silent screamers. Science Digest, May 1984. p. 57.

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