Génesis 35:17
“Aconteció que, como había trabajo en el parto, la partera le dijo: ‘No temas, porque también tendrás este hijo’”.

Desde los tiempos del Antiguo Testamento las parteras han ayudado a las madres durante el proceso de alumbramiento.  Éstas son especialmente valiosas si se presentan dificultades ya que no sólo ofrecen un par de manos extras sino la experiencia de lidiar con problemas comunes.  Algunos de los científicos que estaban estudiando el comportamiento de las amebas observaron un comportamiento que sugiere que algunas amebas, también emplean parteras.

Amoeba midwivesLos científicos han estado estudiando una ameba que vive en el tracto digestivo de los reptiles.  Como todas las amebas, se reproducen al partirse en la mitad.  Sin embargo, los científicos señalaron, que esta especie en particular no es muy buena en realizar esto.  Hasta un tercio de las veces, las amebas fracasan en dividirse.  Empiezan el proceso pero nunca llegan a completarlo.  Cuando esto sucede la ameba está condenada a vivir cuanto tiempo pueda con dos pares de información genética.  Pero, al observar los científicos, cuando una ameba tenía dificultad en dividirse, otras amebas se le acercaban y le ayudaban en el proceso de división, por lo tanto estas servían como parteras.  Más estudios revelaron que la ameba que está teniendo dificultad en dividirse libera un químico que aparentemente convoca la ayuda de otras para terminar con el proceso.  A las amebas parteras se les ha visto que viajan hasta 40 veces su propio tamaño para ayudar en el nacimiento de una nueva generación.

La Biblia nos enseña que Dios cuida de todas Sus criaturas.  Aquí vemos que provee hasta para las necesidades de una simple ameba.  ¡Cuánto más nos ama y proveerá para nuestras necesidades!

Prayer:
Gracias, Señor, por las profesiones de ayuda. Ayúdame a estar atento para cuando pueda ayudar a alguien más. Amén.

Notes:
“Distressed amoebas can call for help,” Science News, V. 159, 3/31/01, p. 200.

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