2 Pedro 2:5
“y si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos;”

Pedro escribe en 2 Pe.2:5 que Dios “no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos”.

Sabemos que la selección de Noé para ser preservado no fue un accidente aleatorio. Por el contrario, en Génesis 6: 8, leemos que “Noé halló gracia ante los ojos del Señor”. La gracia que Noé encontró suena similar al Evangelio del Nuevo Testamento, y Pedro describió a Noé como un “pregonero de justicia”.

Esto convierte a Noé en el primer evangelista registrado. Estaba predicando acerca de Dios a un mundo que se había vuelto totalmente injusto. Entonces, ¿fue su mensaje simplemente un mensaje moralista? ¿Era un mensaje que decía “deja de ser malvado y empieza a ser bueno”? No pudo haber sido así porque, como vimos, Noé mismo no fue salvo por ser justo, sino por gracia. Y en la carta a los Hebreos, se describe a Noé teniendo la justicia que viene por la fe. Noé fue salvo por gracia, a través de la fe, tal como lo somos hoy.

Cuando se cerró la puerta del Arca, hubo lugar para muchas más personas. Todo lo que tenían que hacer era arrepentirse y volverse a Dios. De la misma manera, la salvación está disponible para “todo aquel que invoque el nombre del Señor”. La salvación estaba disponible, pero, como sabemos, solo ocho personas tenían esa fe salvadora en Dios.

 Oración: Gracias Señor, por Tu maravilloso medio de salvación. Mantennos anhelosos por ser predicadores de esa justicia que viene por fe, como lo fue Noé. Amén.

Ref: Taylor, P.F. (2007), Noé el Evangelista, https://answersingenesis.org/bible-characters/noah/the-evangelist/ >, consultado 3/30/2019. Imagen: Imágenes Adobe Stock, licenciado por el autor.

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