Eclesiastés 8:16, 17b
“Yo, pues, dediqué mi corazón a conocer sabiduría y a ver la faena que se hace sobre la tierra (porque hay quien ni de noche ni de día retiene el sueño en sus ojos); 17y he visto todas las obras de Dios, y que el hombre no puede conocer toda la obra que se hace debajo del sol. Por mucho que trabaje el hombre buscándola, no la hallará;”

Los fundadores de la ciencia moderna, en general, creía en el Creador.  Los métodos que desarrollaron estaban basados en la verdad de que la creación es voluntaria.  Esto significa que Dios Underwater ventsno estaba confinado a lo que luego definimos como “leyes científicas”.  Dios podía hacer cualquier cosa que quería de cualquier forma que quisiera.  La ciencia no se puede hacer desde un simple sillón de filósofo.  Los científicos deben ir al campo y estudiar como trabaja la naturaleza.  Cuando la ciencia sigue este camino, está abierto a descubrimientos asombrosos.

Un reciente descubrimiento inesperado fueron los desfogues de agua caliente muy en lo profundo de la superficie del océano.  Agua caliente brota desde la cáscara del globo terrestre donde se ha partido.  Esta agua llega a temperaturas tan calientes que podrían hacer que un pedazo de papel estallara en llamas.  Solo la tremenda presión a más de un kilómetro y medio debajo de las olas mantiene el agua en forma líquida.  Fue en este ambiente que los científicos hicieron un descubrimiento aún más asombroso.  Ellos encontraron bacterias que podían vivir en el agua que llegaba hasta los 700?.  Estas criaturas admirables encuentran que el normal, punto de ebullición del agua de mar es tan fría que apenas pueden sobrevivir.  Los científicos siguen intentando aprender como estas criaturas viven en temperaturas que podrían destruir la bioquímica normal de la vida.

Cada descubrimiento nos dice un poco más acerca del trabajo de nuestro maravilloso Creador.  Eso es lo que originalmente la ciencia tenía la intención de hacer.  Mantenga esto en mente cuando escuche a alguien decir que creer en el Creador hace que el trabajo de la ciencia sea imposible.

Prayer:
Querido Señor, ¡que poco hemos aprendido acerca de Tu maravilloso trabajo alrededor nuestro! Te pido que Tú des a los cristianos quienes trabajan en la ciencia más valentía, fuerza y sabiduría, especialmente cuando son atacados por creer en Ti. Amén.

Notes:
Thomas, Lewis. 1983. On life in a hell of a place. Discover, Oct. p. 42. Photo: Public domain.

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