Génesis 8:22

“Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el calor, el verano y el invierno, y el día y la noche.”

El palo de hockey más infame del mundo fue probablemente el gráfico producido por el Panel Inter-gubernamental sobre Cambio Climático en 1998.   El propósito del gráfico era demostrar cómo las temperaturas globales han cambiado con el tiempo y lo que habían provocado estos cambios.   Durante el último milenio, el gráfico mostraba un suave pero constante aumento de la temperatura hasta aproximadamente 1900, cuando el gráfico mostró un fuerte aumento.  Este es el gráfico que ha sido influyente en la percepción pública del Calentamiento Global Antropogénico -la idea de que la Tierra se está calentando y que esto es culpa de la actividad industrial humana.

Ciertamente, parece ser el caso de que el mundo se ha calentado ligeramente desde 1900.   Esto no debería ser una sorpresa. La temperatura media de la Tierra ha fluctuado claramente con el tiempo. Por ejemplo, existe un fenómeno conocido como el Período Cálido Medieval.   Este fue un período en la Edad Media, cuando parecía haber mayores temperaturas que hoyen día.  Las áreas del norte de Inglaterra, como los alrededores de York, pudieron plantar viñedos que hoy en día no se pueden hacer fácilmente.  Este Período Cálido Medieval debe aparecer en el gráfico como una cúpula; sin embargo, el gráfico muestra una línea recta en el último milenio, hasta 1990.   Si el gráfico es tan impreciso para el período 1200 a 1600, ¿cómo puede ser de confianza para el siglo XX?   De hecho, muchos científicos destacados han criticado todas las partes del gráfico, lo que sugiere que los datos no apoyan este gráfico alarmista.

Es una garantía que la Biblia nos recuerde que no habrá cambios importantes en el Clima Global hasta que Dios ponga fin al mundo.

Gracias, Señor, que mientras la tierra permanece, la siembra y la cosecha, el frío y el calor, el verano y el invierno, el día y la noche, no cesarán. Amén.

Ref: Lawson, N. (2008), Un llamamdo a la razón, (Duckworth), pp. 17-21. Imagen: Creative Commons Attribution Share-Alike 2.5 Genérica.

 

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